RibaRoja

Dímas no podia creer lo que le estaban comunicando por la radio interna de la central hidroeléctrica. Acababan de encontrar el cuerpo sin vida de Andrei, un operario de mantenimiento, en uno de los pasillos del tercer nivel. Dímas era el jefe técnico desde hacía 7 años y desde el principio ya habia escuchado rumores de los trabajadores, que con el paso de los años, habia podido comprobar él mismo. Pero aquello ya era demasiado.

La presa de RibaRoja se construyó en la decada de los 60 como resultado del plan hidrológico de la región. Se levantó a costa de algunos desgraciados accidentes mortales. Las precarias condiciones y el retraso en la obra fueron la causa principal, aunque no la única. La investigación sin embargo no fue mas allá.
Sus gruesos muros de hormigón, y el laberinto de pasillos y túneles que lo conformaban hacian que no fuera un lugar especialmente indicado para alguien con claustrofobia. No era el caso de ninguno de los trabajadores destinados a la central. Y aún así, ya desde antes que Dímas llegara, los turnos de noche se solían evitar, aún cuando la remuneración era considerablemente mayor.
El motivo: nadie queria hablarlo abiertamente, pero sí se comentaba en petit comité, que en muchas ocasiones, sobre todo a partir del nivel 3, se escuchaban voces o pasos que se acercaban. Y tan pronto como se escuchaban, se desvanecían. Era imposible que los sonidos procedieran de otros niveles o pasillos, puesto que la separación y el grosor de las paredes lo hacía imposible. Así que la única explicación que se encontró, para intentar calmar los ánimos, fue que el sonido constante del agua circulando por las cañerias y por los sectores inferiores de la presa provocaban esa distorsión en la percepción, como una paraidolia.

Andrei no era sospechoso de ser ningún miedica. Su origen ruso le confería un carácter rudo y poco amigable, y era de los pocos que se podian pasar horas en solitario realizando labores de mantenimiento. También había oído y sentido presencias en los húmedos pasadizos, pero simplemente las ignoraba y siempre decía que estaba acostumbrado y que no le molestaban. Cuando lo encontraron, tenía la cara desencajada, los ojos abiertos como platos y un rictus de horror en su expresión. El diagnóstico médico hablaba de un ataque al corazón, sin mencionar ninguna otra causa aparente. Las cámaras de seguridad instaladas en cada nivel no lograron capturar nada, simplemente se veia entrar al malogrado operario por última vez, al pasar al lado de una de ellas.

El nivel 3 se cerró temporalmente, mientras se decidía qué hacer. Ahora nadie quería bajar hasta allí, ni siquiera en grupos. A medida que pasaba el tiempo, el recuerdo de lo sucedido se fue desvaneciendo. En las plantas inferiores a la 3 no había vuelto a haber ningún incidente relacionado con voces o pasos que se acercasen. El jefe técnico decidió reabrir el nivel y poco a poco se reemprendieron las labores de mantenimiento sin que nunca más se volviera a notificar ningún otro tipo de anomalía.

¿Qué fue lo que vio Andrei aquel día?
¿Qué eran o qué querían las voces que se escuchaban?
¿Por qué se detuvieron después de su muerte?...

Creative Commons License
This work is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 International License.

Comentarios

  1. Conocí a una persona que trabajaba en una central hidroeléctrica. También solía comentar las voces que se oían en las galerías, a menudo acompañadas de una fuerte sensación de presencia, aunque en realidad no se podía ver a nadie. Supongo que achacar el sonido a la corriente de agua debe ser la excusa común para todos ellos. Una manera de negar lo que no se quiere aceptar. Al menos en mi casa, al abrir el grifo no noto presencias, ni la cisterna del wc me susurra, ni nada de eso.
    Yo, ciertamente, evitaría ese fabuloso turno de noche. O ese fabuloso trabajo que puede acabar con tu cordura. ¿Cuánto de cierto habrá en la historia del Nivel 3?

    ResponderEliminar
  2. No continuó la investigación? Se sabe algo más acerca de la muerte de Andrei? Alguna vez se ha desclasificado algún informe acerca de la investigación?
    Estoy intrigado por cómo quedó el caso, en una ocasión conocí a un hombre que realizaba trabajos frecuentes en Riba-roja, y me contó historias acerca de sucesos extraños en los pozos de achique de la presa situados en las galerías más inferiores...desconozco si tiene relación con el suceso de Andrei...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Este finde intentaré continuar la historia, y todo se aclarará...o no :)

      Eliminar
  3. La indiferencia de Andrei ante los rumores del Nivel 3 podría ser una efectiva coraza para alguien que no quiere hacer frente a los demonios internos. Nada como la zozobra de lo que ocultamos para que acabe apoderándose del miedo y
    personificándose en el presente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No vas mal, Andrei no era del todo trigo limpio...

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

RojaRiba (parte II)

Moon